CUENTOS Y LIBROS

 ¡EN FAMILIA!  
Este libro habla de todos los tipos de familia. Recibió el premio de literatura juvenil alemana en 2011 y al leerlo se entiende perfectamente. Es un libro ya no de lectura recomendada a familias "diferentes" sino a cualquier tipo de niño puesto que abre una enorme puerta a la tolerancia. Os dejo también unas de sus páginas  porque una imagen vale ....lo que ya sabéis.
Este libro pertenece a la editorial Takatuka.











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Autora: Pascale Francotte // ISBN: 9788424629427

Un libro que se centra, mediante un enfoque dulce, tierno y amable, en una familia que se ha recompuesto. La historia de un niño que, tras la separación de sus padres, tiene que lidiar con los problemas que le supone tener dos nuevas familias: su padre y su nueva pareja, que tiene una hija, y su madre y su nueva pareja, que también tiene un hijo.

Un libro realista, para niños de 3 a 6 años, que muestra con optimismo cómo se puede superar la confusión tras un divorcio y reconstruir de nuevo una familia.


LA MEJOR FAMILIA DEL MUNDO
 

Una Familia Grande Para Un Nido Pequeño
nido con huevos y cria
Una preciosa y fría tarde de otoño, una mamá pajarita y un papá pajarito se disponían a dormir a sus dos pichones bajo sus plumas calentitas, cuando todos escucharon a otro pajarito pequeño piando desesperadamente, de hambre y de frío.
El más listo de los pichoncitos se acurrucó con su mamá mientras le decía:
-¿Quién es ese que chilla tanto, mamá? Parece que no tiene nido como nosotros - preguntó el mayor y más fuerte de los hijitos.
- Sí, - dijo el papá - se trata de un pajarito que se cayó del nido y está muy debilito y frío. Yo lo vi esta tarde cuando les traía comida a ustedes.
- ¿Qué podemos hacer por él? - preguntó la mamá a su familia, y agregó: - Le podríamos dar albergue y comida, si pudiéramos subirlo hasta acá.
- No, mamá. ¡Déjalo ahí donde está! - dijo el pajarito más listo y fuerte - que si le das comida va a querer comérsela toda, y lo traes para acá arriba, él va a querer arrimarse a ti para estar más calentito. Entonces, ¿dónde podré ponerme yo? ¿Eh?.
- Sí, mamá; yo quiero que se calle, así es que baja tú y dale algo de comer, pero no lo traigas para acá, que este nido es muy pequeño y no cabe nadie más.
El papá pajarito, que escuchaba estas dos opiniones, de modo muy dulce se dirigió a sus dos hijos y les habló así, de esta forma que voy a contarles:
- Hijitos queridos: ese pajarito perdió a sus padres y tiene hambre. Su nido fue destruido por un señor muy malo que no se dio cuenta que él había quedado vivo. Aquí vosotros estáis bien alimentados y calentitos. Yo puedo ir a buscar al niño bueno que es mi amigo y que vive en aquella casa y puedo también hacerle comprender que tome al pajarito suavemente y lo suba hasta nuestro nido. Así lo podremos alimentar y darle calor.
- Eso mismo pienso yo- dijo la mamá.
- Entonces, si están de acuerdo ustedes dos, que son los que mandan, por ser la mamá y el papá, ¿por qué no lo han traído ya? - dijo el pajarito más listo.
- Porque yo quería que todos estuviéramos convencidos de la decisión que podríamos tomar. Debemos proteger a esa criatura que tiene frío y si viene para acá con nosotros, ¿no se dan cuenta que vamos a estar más apretaditos, y por tanto, tendremos mayor calor?
- ¿Y habrá comida para los tres? ¿para mi hermano, para el otro pajarito y para mí? - preguntó el más pequeño de los hijitos.
- ¡Claro que sí, mis tesoros! Habrá comida y calor para todos y seremos más felices por haber aliviado a una criatura que no tiene a nadie en este mundo.
Y, diciendo esto, la mamá pajarita, llena de ternura, dio sendos besos a sus hijos y otro a su esposo, quien, inmediatamente voló hacia la casa de su niño amigo, dando por hecho que sus hijos estaban convencidos del bien que harían, mientras seguían escuchando los gritos de su futuro huésped, cada vez más débiles.
Y cuentan que al día siguiente amanecieron todos, los tres pequeños pajaritos y sus padres, muy acurrucados en el centro del nido, llenos aún de la cena de la noche anterior y con caras de felicidad. Todavía quedaba espacio en el nido.
Dra. Adania Guanche Martínez
la familia, los abuelos y los nietos
Había una vez un pobre muy viejo que no veía apenas, tenía el oído muy torpe y le temblaban las rodillas. Cuando estaba a la mesa, apenas podía sostener su cuchara, dejaba caer la copa en el mantel, y aún algunas veces escapar la baba.
La mujer de su hijo y su mismo hijo estaban muy disgustados con él, hasta que, por último, le dejaron en un rincón de un cuarto, donde le llevaban su escasa comida en un plato viejo de barro. El anciano lloraba con frecuencia y miraba con tristeza hacia la mesa. Un día se cayó al suelo, y se le rompió la escudilla que apenas podía sostener en sus temblorosas manos. Su nuera le llenó de improperios a los que no se atrevió a responder, y bajó la cabeza suspirando. Le compraron entonces una tarterilla de madera, en la que se le dio de comer de allí en adelante.
Algunos días después, su hijo y su nuera vieron a su niño, que tenía algunos años, muy ocupado en reunir algunos pedazos de madera que había en el suelo.
- "¿Qué haces?", preguntó su padre.
- "Una tartera, contestó, para dar de comer a papá y a mamá cuando sean viejos."
El marido y la mujer se miraron por un momento sin decirse una palabra. Después se echaron a llorar, volvieron a poner al abuelo a la mesa; y comió siempre con ellos, siendo tratado con la mayor amabilidad.
Hermanos Grimm



PEQUEÑO AZUL Y PEQUEÑO AMARILLO



Pequeño Azul y Pequeño Amarillo son muy buenos amigos. Juegan con otro Pequeños colores, van al cole y obedecen a sus papás. Pero un día estos dos amigos se abrazan tan fuerte que se vuelven verdes al mezclarse. Cuando llegan a casa sus papás no les reconocen, ¿qué van a hacer ahora? 

Este cuento sirve para trabajar la amistad, la diversidad de familias y las consecuencias que tiene el no obedecer a los padres.

Autor: Leo Lionni.
Editorial: Kalandraka.

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